Pintura Sumi-e. Orígenes, influencia y por qué me enganchó.
Esta es la primera entrada de mi blog de artista, poca broma, y me apetecía mucho hablarte de la pintura Sumi-e, técnica que llevo investigando año y medio, todo indica que ha llegado para quedarse en mi vida, y espero que también en la tuya… sigue leyendo para saber por qué me enganchó.
Dentro de la gran variedad de arte creado en oriente, la pintura Sumi-e nació como un método único para expresar belleza, equilibrio y buscar que las personas consiguieran las virtudes humanas que veían en la naturaleza. Su origen es Japón, con profundas raíces filosóficas y una particular manera de entender los espacios en blanco y las pinceladas. Esto ha hecho que se enamoraran a esta técnica desde sabios, poetas y filósofos de la antigüedad, hasta artistas contemporáneos muy top. En esta entrada exploro los orígenes, su método, la evolución y la influencia del Sumi-e en el mundo del arte.
Empezamos…
¿Cuándo empezó esto de la Pintura Sumi-e?
El Sumi-e, como muchas otras artes y tradiciones japonesas, tienen sus inicios en la antigua China, donde la pintura con tinta tenía una larga tradición. Es un arte hermana de la caligrafía, y se utilizaban las mismas herramientas, trazos, pinceles y materiales, los llamados cuatro tesoros del escribiente. Más adelante haré una publicación sólo sobre esto que tiene miga.
Sin embargo, fue en Japón donde esta técnica consiguió una identidad única y algo diferenciada de la tradición china. Se cree que la pintura Sumi-e entró a Japón con monjes budistas alrededor del siglo XIV, llevaban rollos de dibujos con historias del budismo en sus viajes, y a través de estas imágenes difundieron este pensamiento… esto siempre me ha dado mucho que pensar, ¡es alucinante el poder que tienen las imágenes! Con el tiempo, se fusionó con la estética japonesa, cogiendo elementos de la filosofía Zen y la religión Shintoista, también le influyó la poesía.
El método del Sumi-e… sí, es un método.
Más que una técnica, el sumi-e es un método… ¿que cuál es la diferencia?, muy sencillo, te voy a contar primero cuál es la técnica, y luego el método, para que me entiendas bien. La técnica del Sumi-e tiene un enfoque de simplicidad y espontaneidad. Los materiales que usamos los artistas sumi-e son la tinta china, el agua y el papel de arroz. La pintura se realiza con diferentes pinceles de cerdas suaves y flexibles, conocido como “fude”, que permite una gran variedad de trazos, desde finos y delicados (yin) hasta fuertes y expresivos (yan), los trazos yin según el TAO, son los femeninos y los yan, los masculinos, y todas las personas tenemos ambos lados, ¡menos mal!
¿Te has dado cuenta? Al final no te he dicho nada del método del sumi-e, no seas impaciente, primera lección zen, se paciente… no te toco más las narices, te cuento. En Japón, el sumi-e se aprende aprendiendo a pintar y dibujar a los cuatro honorables, que no te de miedo su nombre, pueden ser tus colegas desde ahora, te los presento, son: el bambú, el crisantemo, el ciruelo florido, y la orquídea salvaje. Pues bien, para pintar cada uno de estos elementos se desarrolló un método para aprender a dibujarlos por partes, como si fuera un Lego que vas montando hasta que de repente, tienes una pieza creada. También se viene artículo sobre los cuatro honorables caballeros, su método y simbolismo… pero dame margen o apúntate a mis talleres de pintura y cursos de pintura zen y sumi-e para aprenderlo.
La esencia del Sumi-e se basa en la captura del “chi” o energía vital que tienes dentro, ya sea el monte Fuji, un gorrión o un simple bambú. Así los artistas buscamos expresar la armonía entre el vacío y la forma, utilizando gestos rápidos y fluidos para crear composiciones que sugieren más de lo puedes ver de primeras. ¿Sabes que en el barroco les dio por no dejar ni un espacio en blanco? Esto se llamó “horror vacui”, miedo al vacío, que da para otro post (David apunta)… pues la pintura zen es todo lo contrario, se buscan y generan a propósito amplios espacios en blanco que invitan a adentrarte en la pintura, a soñar, a rellenar ese espacio y a disfrutar de esa calma. Ojo a la siguiente obra de mi maestra Yano Yoro (Susana Llorente), ¿ves qué espacios en blanco tan preciosos?, es increíble lo que consigue en esta imagen, me lleva a otro lugar…
Un arte en continuo cambio
A lo largo de los siglos, el Sumi-e ha evolucionado y se ha adaptado a los cambios culturales y sociales. En el período Edo, ha llovido desde entonces (1603-1868), la pintura Sumi-e experimentó un resurgir, a los samuráis les dio por patrocinarlo junto a la estética literaria. Durante el siglo XX, artistas como Yokoyama Taikan y Hasegawa Tohaku llevaron el Sumi-e a nuevas alturas, explorando nuevas técnicas y temas.
Hoy el Sumi-e continúa siendo una forma de expresión artística vibrante en Japón y en todo el mundo. Los artistas contemporáneos reinterpretan esta tradición, fusionando técnicas tradicionales con enfoques modernos y explorando una variedad de temas y estilos. Yo estoy en ese proceso, pero primero, toca dominar el método muy bien, para desde ahí, experimentar, atentos que tengo pensado realizar obra con técnica mixta y sumi-e… mientras, te paso una obra mía de bambúes, disponible hoy en mi galería.
La Pintura Sumi-e te ha influenciado, y lo sabes.
La influencia del Sumi-e va más allá del mundo del arte. Sus principios estéticos, como la búsqueda de la simplicidad y la conexión con la naturaleza, han inspirado a artistas, diseñadores y creadores de todas las disciplinas y sin darte cuenta, estás rodeado de arte oriental, sigue leyendo y lo verás.
Además, el Sumi-e ha influido en movimientos como el impresionismo y el expresionismo abstracto, que valoran la espontaneidad y la expresión emocional. Su capacidad para evocar una sensación de calma y serenidad ha llevado al Sumi-e a ser apreciado no solo como una forma de arte, sino también como una práctica meditativa. Van Gogh se obsesionó bastante con el sumi-e, se enamoró del trabajo de los artistas del siglo XIX Utagawa Hiroshige, que pintó Edo y el monte Fuji, o el gran Katsushika Hokusai, ya sabes, el de la famosa Ola frente a Kanagawa. Por lo que veo, yo llevo el mismo camino, pero espero conservar mis dos orejas… telo cuento en mi próximo post.
Te recuerdo, aquí tienes: MIS CURSOS Y TALLERES SUMI-E.
Mis cursos, arriba. ¡Gracias por leerme!